El #RealFooding, tendencia en alimentación saludable que defiende el consumo de “comida real, de toda la vida” está en boca de todos. Te contamos en qué consiste y cómo convertirte en #RealFooder
Hace ya unos meses que la tendencia del Real Fooding, iniciada por el dietista-nutricionista Carlos Ríos, acapara perfiles foodies de Instagram y recetas de Youtube. Su perfil en Instagram, Real Fooding, ya cuenta con más de 1 millón de seguidores.
Pero, ¿es una dieta? No, en absoluto. Se trata de un movimiento, un estilo de vida. Mientras que las dietas suponen un período de cambio de rutinas alimenticias con una fecha final, el Real Fooding es un cambio general en nuestra alimentación. Para ello, debemos prestar atención a los ingredientes que consumimos y a sus valores nutricionales y alejarnos de los alimentos ultraprocesados.
¿Qué entendemos por comida real? Carlos Ríos lo define como “todos aquellos alimentos frescos, mínimamente procesados o cuyo procesamiento industrial o artesanal no haya empeorado la calidad de la composición o interferido negativamente en sus propiedades saludables presentes de manera natural”.
En cambio, del otro lado, tenemos los ultraprocesados, que no tienen ningún alimento completo sino largas listas de ingredientes que pasan por un procesado previo: hidrogenación, fritura de los aceites, hidrólisis de las proteínas o refinación de cereales y harinas, entre otros.
Dicen los expertos que en el supermercado un 80% de los alimentos expuestos son ultraprocesados, que contienen ingredientes que estimulan nuestro apetito y a los que nos cuesta resistirnos. Las investigaciones en alimentación culpan a los ultraprocesados de muchos de los problemas actuales como el sobrepeso, la vida sedentaria o algunos tipos de cáncer. Así que, ¿por qué no un cambio de actitud en nuestra alimentación intentando reducir este tipo de alimentos?
¿Cómo los distinguimos? Dice Carlos Ríos que observaremos que la comida real suele llevar menos de cinco ingredientes y normalmente solo lleva uno que es el ingrediente principal: zanahorias, plátanos, sardinas, garbanzos…Opciones no nos faltan.
EJEMPLOS DE REAL FOOD:
- Verduras, hortalizas y frutas
- Pescado y marisco
- Frutos secos
- Huevos
- Hierbas, especies y semillas
- Café e infusiones
EJEMPLOS DE FAKE FOOD:
- Fideos instantáneos
- Yogures y helados
- Bollería industrial
- Nuggets y palitos de pescado
- Algunos embutidos como la mortadela o el chóped
- Refrescos y bebidas energéticas
Cambiar tu estilo de alimentación de un día para otro es complicado, y de hecho, a todos nos apetece de vez en cuando algún capricho dulce y grasiento. Lo importante es tener conciencia y que estos fake foods sean de consumo ocasional, basando nuestras rutinas nutricionales en comida real que nos aportará salud y con la que podemos disfrutar también.
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