Disfrutar de la buena comida es una de las mejores cosas que se puede hacer en esta vida. ¿A que sí? Por eso en Areas nos esforzamos tanto en llevarte las recetas más sabrosas y de calidad a las estaciones de servicio de autopistas y a las áreas de servicio en estaciones de tren y aeropuertos: porque siempre es un buen momento para deleitarse con la gastronomía. No obstante, y como cualquier otro sector, este también genera en su actividad un impacto en el medioambiente que puede agravar la crisis climática y comprometer algunos hábitats naturales. ¿Dejamos de disfrutar de la buena comida? No. La verdadera solución para conseguir una gastronomía sostenible es la cocina del futuro.

Una gastronomía que vela por el futuro

La sociedad ha comprendido, en estas últimas décadas, que existen dos maneras de hacer las cosas: o mirando únicamente por el beneficio propio o buscando el equilibrio entre la satisfacción presente y la preservación del futuro. Es bajo esta última actitud como ha surgido y se ha desarrollado la gastronomía sostenible, cuyo día mundial se celebra este 18 de junio por decisión de la Asamblea General de las Naciones Unidas. No es una simple tendencia de moda. No es solamente un hashtag de Instagram. Es una corriente firme que se fundamenta en una serie de principios claves destinados a reducir el consumo de recursos y la huella de carbono. ¿Lo vemos en detalle?

Uso de ingredientes locales

Uno de los principales factores contaminantes de la gastronomía globalizada es el hecho de que muchos ingredientes vienen desde lugares del planeta muy lejanos, lo que implica un consumo energético enorme solo en el transporte y la conservación. Por el contrario, quienes practican la gastronomía sostenible priorizan siempre que resulta posible la adquisición de ingredientes locales. De esta forma no solo cuidan del medioambiente, sino que también apoyan a los pequeños productores locales.

Uso de ingredientes de temporada

Tan importante es que los ingredientes procedan de producciones de cercanía como que sean de temporada. Y la razón es sencilla: para crear cultivos que funcionen en épocas del año en las que no funcionan de manera natural, se requieren métodos y tecnologías que incrementan de un modo radical el consumo de recursos hídricos y energéticos. Para evitarlo, los establecimientos que proponen una gastronomía ética y sostenible diseñan sus recetas teniendo en cuenta los ingredientes de temporada.

Prevención de la destrucción

Emplear exclusivamente ingredientes locales de temporada reduce considerablemente la huella de carbono de un plato. Sin embargo, existen una serie de materias primas para cuya extracción se requiere una destrucción de bosques, océanos u otros hábitats naturales. En ese sentido,  quienes practican la gastronomía ecológica tratan de identificar esos ingredientes, como el aceite de palma o los peces muy pequeños, para no incluirlos en sus recetas y no incrementar la demanda sobre ellos. Es una cuestión de conciencia.

Respeto por el bienestar animal

Los movimientos animalistas también han extendido la conciencia acerca del bienestar animal. Y no se trata necesariamente de eliminar para siempre y tajantemente su consumo, sino de preocuparse por obtener esos recursos gastronómicos, animales de granjas que verdaderamente respeten su bienestar y den a las criaturas una vida digna. Se la merecen. También supone en ocasiones reducir un poco el consumo para dar respiro a la demanda de alimentos de origen animal y de paso crear recetas mucho más saludables.

Las tres erres del reciclaje

Las tres erres del reciclaje refieren a la reducción, la reutilización y el reciclaje propiamente dicho de las materias primas. Y sí, también forma parte de la gastronomía sostenible. La reducción y el reciclaje, por un lado, afectan a todo aquello que participa en la experiencia culinaria, pero no es comida como los utensilios, los envases o el establecimiento en sí. La reutilización, por otro lado, puede afectar tanto a esto último como al aprovechamiento de todos los recursos presentes en un ingrediente.

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La Place: la apuesta de Areas por la gastronomía sostenible

¿Te convence la gastronomía sostenible? ¿Tienes claro que gozar de recetas de calidad al mismo tiempo que proteges el planeta, es una idea de lo más acertada? ¡Pues tienes que saber que La Place es un lugar que te ofrece precisamente eso! Ubicado en muchas de las autopistas y autovías del país, así como en algunos de los principales aeropuertos, este establecimiento healthy food está pensado para viajeros que desean comer sano, comer rico y comer responsable. Desde bocadillos y focaccias a ensaladas, pizzas, frutas frescas, yogures o zumos de frutas naturales, entre muchas otras recetas más. Y todo producido con un escrupuloso respeto por nuestro planeta. ¡Disfruta sin ningún remordimiento!

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